Trabajamos en la "baja policía" en la casa, almorzamos los seis juntos, como todo los domingos. Vinieron los traperos de Emaus a llevarse lo que teníamos para ellos; y todo sucedió en un día sin luz.
La luz se fue como a las 12pm y no hubo ese sonido que nos rodea a diario: Tv, música, internet, entre otros...
Qué lindos los tiempos en que aún no se inventaba la luz...A veces me gustaría saber cómo eran realmente...
Largas y cortas conversaciones...paseos en la ciudad a pie,...la luz de las estrellas en las noches,...
Cierro los ojos y casi lo veo todo...
El silencio de las noches en casa,...las voces de los hijos mezcladas con las de sus padres,...las oraciones en familia,...las manos entrelazadas,...el sonido de los grillos,...el recuerdo de los que partieron...
Sentimientos compartidos, sueños y proyectos anunciados, sonrisas de buenos deseos...
El mundo no se detiene, los avances de la ciencia crecen y deben favorecer a los hombres...
Puede ser que necesitemos computadoras, música, cámaras filmadoras y televisión para disfrutar del nuevo siglo...
Pero no los canjeemos por la paz y la tranquilidad de los antiguos días de silencio.
Porque aquella paz nos acercó a lo único verdadero: La familia.
Tus hijos crecerán, aprovéchalos!!!
Tú crecerás, comparte tu juventud con ellos!!
Tú partirás, disfruta de tus días sabios con los que te regalaron sonrisas invaluables.
La vida es ahora. No cuando venga visita. No cuando sean grandes. No cuando llegues a la cuota. No cuando te compres tu casa. No cuando llegue la camioneta nueva. No cuando lleguen las vacaciones.
Busca tiempo! Y si no, ponte al día!!!
Así como tus hijos deben hacerlo en el colegio, tú también ponte al día en tus deberes!!
No tengas miedo, porque sí puedes...
Todo lo podrás en Cristo que te fortalece.
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